Aprendizaje Basado en Competencias (ABC)
La educación se encuentra enmarcada en un contexto caracterizado por constantes cambios y avances. El mundo que hoy luce un rostro globalizado desafía a las instituciones educativas. La llegada de las TIC’s (Tecnologías de la Información y el Conocimiento) comenzaron a difuminar las fronteras existentes entre la educación formal e informal, entendiendo al proceso de aprendizaje como una actividad continua de aplicación y transferencia de los conocimientos aprehendidos.
Todos los cambios sociales, económicos y culturales que vienen sucediéndose desde el siglo XX con inusitada celeridad, nos introdujeron a la actual “sociedad del conocimiento” cuyo valor está centrado en el reconocimiento del capital humano.
La herramienta principal de las sociedades del conocimiento es la información. Esta, no tiene valor en sí misma sino que cobra sentido en la medida que promueve la generación y el acceso al conocimiento, apoyando el desarrollo humano, esto es: la autonomía, la pluralidad, la integración, la solidaridad y la participación.
En este marco, si el mundo en el que vivimos y las personas en sí mismas hemos cambiado, también se han transformado las formas en las aprendemos. Los modelos educativos tradicionales caracterizados por el verticalismo y la rigidez van dejando paso a formas más flexibles y horizontales, donde el conocimiento se puede crear de forma colaborativa y a través de la práctica. Es por ello que te invitamos a leer el siguiente apartado sobre Aprendizaje basado en competencias.
Ahora si: ¿Qué es el aprendizaje basado en competencias?
El aprendizaje basado en competencias es un enfoque educativo centrado en demostrar los resultados del proceso de aprendizaje, ubicándolos en el centro del mismo. Se hace hincapié en la progresión del estudiante, es decir, en sus avances cotidianos. Para este enfoque es importante el dominio de las competencias que están en juego en, por ejemplo, una asignatura. Se entiende que el estudiante debe demostrar que se ha hecho con el dominio de dichas competencias para poder avanzar, pero eso no implica no respetar su propio ritmo. De esta manera, para algunos educadores el aprendizaje basado en competencias puede ser pensado como una forma de aprendizaje basado en los resultados.
Este enfoque educativo requiere crear un ambiente que permita a todos los participantes aprender a través del trabajo colaborativo y la generación de metas comunes, esto con el fin de promover la cooperación entre ellos.
En palabras de Blanco (2009): “el enfoque por competencias, y concretamente el desarrollo de competencias generales, implica romper con prácticas y formas de pensar propias de un sistema educativo que pondera los programas de estudio cargados de contenidos y la enseñanza de la teoría en buena medida divorciada de la experiencia práctica del alumno”.
El Modelo de Aprendizaje por Competencias parte de la premisa que el saber no es sólo conceptual, sino que puede identificarse un saber, un saber hacer y un saber ser. Para ello, se busca que en los espacios educativos se promuevan situaciones de aprendizaje reales o simuladas en donde se presenten problemáticas profesionales contextualizadas y complejas.
Este enfoque pedagógico está ligado al método de enseñanza conocido como “estudio de casos”, ejercicios que plantean un problema de la vida real, demandando a los alumnos la tarea de poner en contacto los conocimientos teóricos con soluciones prácticas.
Asimismo, el rol del docente también se ve modificado: en estos contextos educativos se convierte en “facilitador” y “mediador” de conocimiento, ya que comparte experiencias y saberes bajo un proceso de negociación, acompañamiento y construcción conjunta con cada uno de los estudiantes.
Así también, existe un cambio significativo en el rol del estudiante. Este ya no es un sujeto pasivo sino que se convierte en un sujeto activo, por lo que se espera que sea autónomo y responsable de su propio aprendizaje.
A partir de esto, en Evaluados desarrollamos un módulo llamado aprendizaje basado en competencias (ABC), el cual le presenta al estudiante un caso real donde debe poner en práctica aquellas competencias vinculadas con su carrera.
Gracias a la ubicuidad y a la portabilidad de la app, el estudiante puede acceder a un flujo de práctica donde encontrará no solo preguntas que pondrán en juego su juicio profesional, sino que además, contará con recursos multimedia complementarios con el objetivo de simular una situación de la vida profesional.
Gracias a ello el docente podrá acceder a la información necesaria para conocer si el aprendizaje de saberes prácticos ha sido alcanzado. En tanto, el estudiante pondrá a prueba sus conocimientos de una manera gamificada, práctica y autónoma.
En Evaluados trabajamos día a día para hacer de la tecnología un aliado en los procesos de enseñanza-aprendizaje, haciendo que la innovación digital se convierta en una realidad para aquellas instituciones que nos eligen. Y, en tu uni ¿realizas desafíos basados en competencias?